Aparecimos por estos lugares de casualidad. Nuestro siguiente objetivo después de San Francisco era Yosemite, pero como coincidian algunos días con el fin de semana decidimos evitar estos días. Así que buscamos estas opciones. Grata sorpresa sin duda.
Point Reyes es un parque nacional que está como a 1h al norte de San Francisco. De camino atravesamos el mítico Golden Gate (no sentí nada especial) y nos permitió ver la bahía de San Francisco a vista de pájaro. Es más estabamos caminando hacia una pequeña loma para divisar la bahía y atravesó la carretera con toda confianza un ciervo, el primero de muchos.
La península de Point Reyes está delimitda con la tierra por una línea recta, esta perfecta línea corresponde a la falla de San Andrés. Point reyes está situado en la parte de la falla definida como "del Pacífico" y el otro lado corresponde a la falla denominada "Norte Amércia". El empuje de esta fallas entre sí a provocado la aparición de las elevaciones costeras de Point Reyes que llegan a alcanzar hasta 500mt de altura. Otra de las implicaciones de esta falla es la climatología. En la zona cercana al mar el clima es moderado y la tierra es fertil, lo que ha hecho esta zona atractiva desde muy antiguo. Por ejemplo, los Miwoks, antiguos pobladores indios, cultivaban maiz y bayas, pescaban salmón y marísco y cazaban ciervos y alces.
Un punto de imprescindible visita es su curioso faro que ha alumbrado a marinos durante más de 100 años. Este faro se puede visitar, para lo cual hay que bajar su 300 escaleras y luego subirlas!!. Teniendo esto encuenta, imaginaos el duro trabajo del farero cuando este faro funcionaba con carbón, y conscumía 140 lbs (unos 63 kg) de carbón por hora.
Como muchas veces elegimos el Youth Hostel del lugar para alojarnos. Una gozada!! Estaba en medio del parque, sin cobertura ... un lugar genial para perderse. Desde el mismo Hostel había algunos caminos que salian para recorrer la zona. Nos fuimos a uno un poco más alejado, que al coger un poco de altura permitia una vista de pájaro del parque. Comenzaba la ruta en una pista ancha con la vista de campos amarillos con árboles verdes y un cielo azul. El sol no pegaba muy fuerte pero para caminar excesivo, parecia que iba a ser duro, cuando la pista se desvío hacia un bosquecillo. Que maravilla!! desaparecieron el resto de los caminantes, y sólo había un estrecho sendero al que llegaba el frescor del bosque. A primera vista era todo árbolado de pinos y cipreses, pero caminando con calma se veían un montón de flores de muchos colores, hasta alguna seta. En algunos de estos caminos está permitido el recorrido a caballo, en los que la anchura permite su paso. Nos metimos por una ruta que especificamente decía "NO HORSES", el camino era estrechisimo. Al poco aparecen jinetes, nos vamos a dar la vuelta para dejarles pasar, y la "lider" nos dice que no que el caballo nos ha visto, que nos quedemos donde estamos y les hablemos a los caballos ¿?. Are you kidding me? Pues ahí nos quedamos, hablando la los caballos mientras pasaban. Menudos cuartos tenían, vaya planta, la verdad que eran preciosos. Estos no son como los que pasean en Laredo.Continuamos la ruta y el camino se iba cerrando a veces entraba duda de sí ese era el camino. De repente se abría a una zona que se veía que habían limpiado, era zona como de arbusto y de no estar cuidada sería imposible atravesarla. Al rato de nuevo un camino cerrado, cerradisimo, eso si que era estar en plena naturaleza. Hasta que salimos a un campo gigante, con horizonte de arbustos y un cielo con nubes perfectas para la foto. Aparecimos como surgidas del medio del bosque, un grupo que andaba por allí se quedo mirando, como pensando de donde salíamos.
Nos habíamos ganado la comida, y fuimos al pueblo de Point Reyes. Era como retroceder un montón de años. El pueblo con su saloon, su market de verduras, una única calle... Nuestra intención era comer, pero como eran las 17h, todo el mundo iba a cenar. Así que hicimos la comida-cena, en casí el único restaurante del lugar. A las 17:10 se había llenado de gente, como si estuvieran esperando a la hora.
Después de llenar el estomago, volviamos al Hostel disfrutando del paisaje y la carretera. Como siempre con prudencia con la wildlife (los animales salvajes). Y no lo dicen en broma, de repente se nos aparecio una mama ciervo (deer) con sus dos crias. Paramos para dejarle curzar pero decidio continuar por el arcen. Continuamos el camino para acercarnos a la playa y ver la puesta de sol, cuando en una campa junto a la carretera un alce (elk). Que imponente!! Vaya pose, se quedo mirando como para que le sacaramos la foto, cubierto hasta media altura por la hierba de la campa. Preciosa estampa. Cuando consideró continuo su camino y desaparecio detrás de una colina.
Nos habíamos ganado la comida, y fuimos al pueblo de Point Reyes. Era como retroceder un montón de años. El pueblo con su saloon, su market de verduras, una única calle... Nuestra intención era comer, pero como eran las 17h, todo el mundo iba a cenar. Así que hicimos la comida-cena, en casí el único restaurante del lugar. A las 17:10 se había llenado de gente, como si estuvieran esperando a la hora.
Después de llenar el estomago, volviamos al Hostel disfrutando del paisaje y la carretera. Como siempre con prudencia con la wildlife (los animales salvajes). Y no lo dicen en broma, de repente se nos aparecio una mama ciervo (deer) con sus dos crias. Paramos para dejarle curzar pero decidio continuar por el arcen. Continuamos el camino para acercarnos a la playa y ver la puesta de sol, cuando en una campa junto a la carretera un alce (elk). Que imponente!! Vaya pose, se quedo mirando como para que le sacaramos la foto, cubierto hasta media altura por la hierba de la campa. Preciosa estampa. Cuando consideró continuo su camino y desaparecio detrás de una colina.
El valle de Sonoma (no confundir con Sonora) y Napa es uno de los orgullos californianos por sus vinos. Aunque nos acercamos a la ciudad de Napa por verla, rápidamente nos recomendaron un recorrido por sus bodegas. Incluso hay tours organizados que te llevan, o un tren que hace el recorrido. La mayoría de las bodegas están situadas a ambos lados de la autopista (Hw 29), lo que llaman autopista es como una carretera comarcal. Así que una vez que planificas qué bodegas quieres vistar (todas es imposible) te lanzas por la carretera. En la primera que estuvimos (Rutherford grove) hicimos una cata de unos cabernet sauvignon y chardonnay. El recorrido comenzaba en las viñas explicando la historia de la bodega, la mayoria son de 197*, y la base son uvas traidas de Europa que han adaptado o modificado. Luego un recorrido por el interior de la bodega explicando los distintos vinos y sus procesos. Muy interesante y gustoso. En general, los vinos eran muy afrutados, mucho. Diferentes de lo que estamos acostumbrados. Continuamos la visita por un par de bodegas más, sólo 2 mas por que cerraban a las 5 y por que si no teníamos que quedarnos allí mismo a dormir.
Kaixo Amaia, me he enterado de que tienes este blog, no es que te siga tus aventuras, pero y de lo nuestro que?, tenemos el terminal de contingencia triste, muy triste, (es broma). Disfruta a tope. Recuerdos de tus seguidores del Middle. Agur. Larrinaga
ResponderEliminarJaja Larri, he tardado un rato en caer quien eras, para que veas que desconecte. Ahora estoy echando un cable a los de Wall Street, parece que tienen pegas tb con el terminal de contingencia. Enjoy. Saludos
EliminarEl señor alce impone eh? Que guay Amaiuki!! Me han encantado las dos ultimas crónicas....que raro lo de san Francisco, a mi me encanto...lo que pasa es que llevas ya mucho, vuelveeeeee!!! A ver que tal JOsemite, ciudado con los osos! Muakkkk
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